En la ermita del Cristo de Rivas se celebra cada 29 de septiembre, día de San Miguel, la romería del Cristo de los Afligidos, conocida popularmente como "Cristo de Rivas". Su origen se remonta a 1.655. La imagen es más moderna, de los años cuarenta del pasado siglo, pues la anterior fue destruida en la Guerra Civil.
Esta tradicional romería atrae a fieles de toda la Comunidad de Madrid, pero especialmente son los de las localidades más cercanas los que tienen más fervor y devoción por el Cristo, siendo muchos los vicalvareños que se acercan al lugar, incluso andando (la distancia desde aquí hasta la ermita, ubicada en el término de Rivas-Vaciamadrid, es de 8 o 9 kilómetros).
Centenares de velas rogaban al Cristo en los laterales de la explanada, como petición para el restablecimiento de la salud; se podían encontrar también en los puestos alineados en la sinuosa carretera que lleva a la ermita exvotos de cera, relacionados con las peticiones de sanación de los fieles.
En los últimos años ha disminuido el número de romeros que acuden de rodillas o descalzos, aunque la afluencia sigue siendo elevada, incluso en un día tan desapacible como el de este año.
Pero como en toda romería, también hubo tiempo para la fiesta. En los puestos no sólo había cirios, estampillas y exvotos; también encontraron espacio chucherías, juguetes y hasta ropa interior, y por supuesto las churrerías, los bares y los dulces, especialmente las rosquillas elaboradas para la ocasión.
